Blog: “Cambiando el 18 de septiembre por el Oktoberfest", en Alemania

Hallo, Leute! Soy Macarena Uriarte, estudiante de cuarto año de Administración Pública. Actualmente, estoy de intercambio cursando mi octavo semestre en la RheinMain University of Applied Sciences en Wiesbaden, Alemania. Ya llevo dos meses aquí, llegué justo cuando comenzaba el otoño, lista para experimentar el verdadero invierno alemán en todo su esplendor.

 

Primero, quiero contarles que, como se imaginarán, este no es un proceso fácil… ¡pero es una aventura increíble! Desde el principio, todo ha sido un desafío: postular, reunir los documentos, mejorar mi inglés, aprender algo de alemán y un sinfín de detalles más. Además, llegar aquí y aprender a vivir sola, a cientos de kilómetros de mi familia y seres queridos, ha sido un reto enorme. ¡Pero cada esfuerzo ha valido totalmente la pena! Todo lo maravilloso que he vivido no se compara con las pequeñas dificultades. Por eso, vengo aquí para animarlos a vivir esta experiencia, porque lo que se gana es mucho más grande que cualquier obstáculo.

 

Estudiar en Alemania es una experiencia increíblemente enriquecedora y llena de retos. Así que, para quienes consideren esta opción, aquí van algunos consejos que, desde mi experiencia, pueden hacer la llegada a un lugar tan nuevo mucho más amena.

 

Idioma: El inglés es el idioma principal y requerido para realizar el intercambio, ya que en el entorno académico todo se maneja en inglés. Desde las clases hasta las interacciones con tus compañeros, que pueden ser de diversas nacionalidades como italianos, franceses, coreanos, africanos, entre muchas otras. El inglés facilita enormemente la comunicación con personas de cualquier parte del mundo. Sin embargo, en la vida cotidiana fuera de la universidad, el idioma predominante es el alemán. Aunque la mayoría de las personas están dispuestas a comunicarse en inglés, es útil conocer expresiones básicas en alemán como saludos, despedidas y presentaciones. Antes de venir, tomé un taller de alemán en la Usach que me fue muy útil, ya que aquí, al llegar, es obligatorio realizar un curso de alemán en la universidad, por ende, el taller me permitió enfrentar el curso “semi-preparada”.

 

Estilo de Estudio: Aquí el enfoque es mucho más autodidacta. Tomé todos mis cursos en inglés, y en la mayoría solo hay un examen al final del semestre y una clase semanal de 1 hora y media. Esto es muy distinto a la Usach, donde tenemos clases y evaluaciones constantes. Este sistema depende mucho de la responsabilidad individual y deja gran parte del aprendizaje en manos del estudiante, algo que ha sido desafiante, pero también una excelente oportunidad para desarrollar autonomía y disciplina.

 

Vivienda: Hay muchas opciones para alojarse y la elección es completamente libre. Yo opté por una residencia universitaria, donde solo aceptan estudiantes matriculados, y sinceramente recomiendo esta opción. Vivir en una residencia te permite convivir con personas que están viviendo experiencias muy similares a las tuyas. Además, tener roomies facilita compartir momentos y sentirte más acompañado en un lugar donde todo es nuevo y desconocido.

 

Cultura y Viajes: Alemania está llena de historia y tradiciones y tuve la suerte de estar en octubre, justo a tiempo para el Oktoberfest en Múnich. Fue una experiencia inolvidable y una excelente forma de sumergirme en la cultura local. Además, he visitado ciudades cercanas como Frankfurt y Mainz, que son fáciles de alcanzar en transporte público. También tuve la oportunidad de viajar a Suiza y en solo cinco horas en tren llegué a Interlaken, donde quedé maravillada con sus hermosos paisajes y naturaleza. Si su intención es aprovechar el intercambio para viajar, esta es una gran oportunidad para combinar la vida académica con la posibilidad de moverse fácilmente de un país a otro en Europa. Así que, atrévanse y no pierdan esta increíble oportunidad.

 

¡Así que eso! Dejemos de lado los clichés de que Alemania es un país frío con gente fría. Claro, el clima es helado (¡Vengan bien, bien abrigados, jajaja!), pero aquí pueden encontrar personas increíblemente amables y generosas. Hasta ahora, esta experiencia ha sido única e inolvidable, y estoy muy emocionada por lo que aún me espera, completamente ilusionada por vivir la navidad europea. Imaginen, la nieve, los mercaditos navideños, el aroma del chocolate caliente, las galletitas… ¡Un sueño hecho realidad!

 

Espero que mis consejos les sirvan y si tienen alguna duda pueden escribirme a mi Instagram. ¡Encantada de ayudar!